Las constelaciones buscan el origen de la situación planteada, y contemplar cuáles son los pasos necesarios que nos llevan a la armonización, y siempre, esta compensación, será en beneficio de todas las partes implicadas.

De este modo, las constelaciones sistémicas van a ayudarnos, entre otras cosas, a:

• Resolver situaciones conflictivas, que se repiten una y otra vez en nuestra vida.

• Hacer un diagnóstico, rápido y claro, de los desafíos a ser transformados del sistema.

• Adquirir una mirada nueva sobre las relaciones familiares, mucho más amorosa y, a la vez, práctica e integradora.

• Descubrir los verdaderos motivos e implicaciones que nos impiden lograr nuestros objetivos.

Gracias a su enorme sensibilidad, su fuerte conexión con el momento presente y su ausencia de prejuicios, los caballos aportan a las constelaciones una nueva dimensión en la calidad de la información. Esta nueva manera de mirar facilita la lectura y la resolución de las situaciones a tratar, de forma nítida y con una pureza extraordinaria.